Hoy os voy a confesar un secreto a voces: contra todo pronóstico soy muy fan de Starbucks. Digo contra todo pronóstico porque no soy muy amante del café, tengo cierta intolerancia a la lactosa y la repostería casera no se me da nada mal. Sé que una persona cafetera preferirá otro café, sé que sus cookies seguramente llevarán más azucar que las que hago en mi casa, y que los croissants puede que valgan más que los de la panadería que tienen al lado, pero me da igual. Me gusta ir a Starbucks. No busquéis la lógica, no tiene.… Leer más