Maneras de amar

Nunca me he sentido tan colmada de sorpresas, de detalles, de regalos, como en esa época. Con él. Una cree que es lo normal, la ilusión del principio que después baja como el soufflé. Pero no. La consistencia se mantenía en el tiempo. 

Y qué bonito que piensen en ti, que se acuerden de ese libro concreto del que hablaste una sola vez, que te llenen de flores y busquen provocar siempre una sonrisa porque sí. 

Pero la vida va y viene, y no se detiene, qué se yoooo (perdón, sigo). En las maduras esto es ideal, pero en las … Leer más

De heroínas…

Lo mío con el derecho no era vocacional. He pisado la Audiencia Provincial de Barcelona una sola vez, pero te aseguro que no fue un martes cualquiera.

Poco sabíamos nosotras, al engullir aquél rápido desayuno, que la invitación de nuestra profesora a uno de sus juicios tendría tal jugosidad. Durante ese día, desfilarían por la sala de lo penal los testigos implicados en el desmantelamiento de una red de tráfico de drogas gracias al chivatazo de la pareja de uno de los acusados. Ni en la tele encontrarás más salseo del que se atisbaba en esa sala.

Dedicamos todo el … Leer más

Hipótesis de Sapir-Whorf

Cuenta Maggie O’Farrell en su libro “I am, I am, I am” que pasó un año de su vida postrada en una cama de hospital como consecuencia de una grave enfermedad. Durante ese tiempo, pensó que se moría. Y lo pensó porque lo decían. A ella no, por supuesto. Todavía era una niña. Pero lo decían por los pasillos y lo disimulaban mal.

Durante ese tiempo, aprendió a leer los cuerpos. No solo las expresiones faciales; el cuerpo entero. La postura, la musculatura, la forma de respirar, de moverse…
Seguramente por eso describe de una manera tan perfecta y natural … Leer más

El síndrome de la rana hervida

Hace unos días leí un hilo en Twitter sobre las “red flags”; esas alarmas, detalles o avisos que nos indican que con esa persona o en esa relación, no. Que por ahí no es. Mal.

Algunas eran cuestión de gustos: no dejar propina, que no le gusten los animales, que fume. 

Otras, en cambio, eran auténticos comportamientos tóxicos que, por su levedad, solemos pasar por alto o incluso esconder entre las demás “buenas” acciones, como hacíamos con las verduras en el comedor escolar. Dejar tu mensaje en leído durante un par de días de manera habitual -estará liadx-, pequeñas mentiras … Leer más